Derramé agua sobre los pantalones de mi vecina mientras barría la habitación. Luego me arrastró, me empujó sobre el sofá, se quitó las bragas rojas y se sentó en mi cara. Mientras estaba sentada en mi cara, lamí su coño rosado. Mi vecina se dejó llevar y se frotó el coño mientras yo le lamía el suyo. También me follé su dulce coño en posición misionera.
Tienes que iniciar sesión para dejar comentarios en el muro. Por favor Iniciar sesión o Regístrate (gratis).