Mis dos hermanastras me tendieron una emboscada durante la cena de Acción de Gracias y me pidieron que les follara sus coños calientes y húmedos. Mis desagradables hermanastras empezaron haciéndome verlas jugar con sus coños. Luego, mis lindas hermanastras se turnaron para montar mi polla en la mesa del comedor mientras nuestros padres miraban. Mis hermanastras cabalgan tan bien mi polla que no quería correrme.
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